Este fin de semana estamos de Feria Amiga Joya, una iniciativa que llevamos adelante junto a Caro de Bruselas y Mayra de Caudal. Y si bien esta es una acción promocional para dar visibilidad a nuestro trabajo, quiero contarles el espíritu que hay detrás de esta sinergia.

En diciembre de 2016, lancé mi marca de joyería salvaje y participé en la Feria de Artesanías de la Rural. Allí conocí las piezas de Caudal y a Mayra, la emprendedora detrás de la marca. Meses más tarde, me anoté en las clases de joyería que daba en su taller. Ahí conocí a Caro de Bruselas, quien ya era socia de May como docente.

A partir de ese momento comienza una historia de aprendizaje del oficio y de construcción de un camino en la joyería en la que estas dos colegas, lejos de transformarse en competencia, se convirtieron en un apoyo incondicional para mí.

Con mucha generosidad compartieron conmigo sus conocimientos en el oficio y la técnica joyera -en el que son muy grosas por cierto. Para mí, siendo una ceramista que estaba incursionando en la joyería, todo lo que me compartían era como agua en el desierto. Entre herramientas y mates pre-pandémicos, fuimos conociéndonos cada vez más y lo que comenzó como mucha buena onda, se transformó en una super amistad.

En 2017 nos subimos a una aventura increíble, fuimos a dos ferias de joyería en Europa!!! Lo hicimos con mucho esfuerzo, poca experiencia y poco presupuesto. No creo que ese viaje hubiera sido posible si no hubiésemos estado las tres resolviendo todo juntas, colectivizando todas las dificultades y trabajando por un mismo objetivo: que nos fuera bien a todas!!!

Cada una cargó en su valija un tercio de los diseños de cada marca, con el fin de minimizar los riesgos si se llegaban a perder, o si teníamos algún inconveniente en las aduanas.

En Amsterdam montamos nuestros stands con materiales que compramos en IKEA y que transportamos en los trenes de esa ciudad carísima que ninguna conocía. Resolvimos los inconvenientes con una lógica de eficiencia, practicidad y economía que nos ganó el apodo de las guerrilleras de la feria. Los stands quedaron espectaculares, cada uno con su impronta pero con un sello que decía: estas chicas se las rebuscan.

Después de Sieraad la feria de Amsterdam, hicimos varias Puro Diseño donde el team guerrillero ya estaba re aceitado. Pero también vinieron viajes de camaradería, vacaciones juntas, kayaks, cervecitas, guisos. Todo lo que hacen las buenas amigas que además son vecinas 🙂

También luego de las ferias de Europa, se sumó Cami de Camila Monserrat (esta vez no participa de la feria porque le dimos franco 🙂 ), con quien nos conocimos en las clases de joyería de Caro y May y además compartimos la Cat Fest, una feria solidaria dedicada a recaudar donaciones para grupos de protección de animales que se hacía anualmente en el Colegio San José.

El 2020 nos enfrentó a un gran desafío. En el contexto de la pandemia, nuestras marcas se vieron tremendamente afectadas por el cierre de los locales que distribuían nuestros diseños así como la disminución de turistas que visitaban la ciudad. Nos vimos obligadas a hacer un ejercicio radical de flexibilidad mental y enfrentar de sopetón una rapidísima transformación a la venta on line.

Aprendimos a velocidad luz y en equipo a hacer marketing digital, mejorar la logística, calcular costos de financiación 🙁 y todo lo que requiere la venta on line. Y de igual manera que con las ferias de Europa, colectivizamos todo: la que aprendía algo más de Facebook Ads lo compartía con el grupo, la que tenía un servicio de delivery más eficiente avisaba al resto, quien tenía una planillita de excel nueva, hacía lo mismo. Y así con todo.

Eso hizo que aprendiéramos mucho más rápido que si lo hubiésemos hecho solas. Sumado a eso, contábamos con la contención emocional dentro de un contexto muy incierto… cuando una se desmoralizaba, el resto le tiraba un salvavidas anímico en nuestro grupito de WhatsApp.

Seguramente la anécdota de ese viaje a Europa cuenta de forma paradigmática cómo ha sido nuestra amistad desde el comienzo. Creo que es algo que va en contra del prejuicio que se puede tener al ubicar inmediatamente a un colega como un competidor. Me enorgullece sentirme parte de este colectivo femenino, ejemplo de sororidad, que se ríe de la vieja idea de competencia y toma la fuerza de las demás como impulso.

En este intercambio tan enriquecedor, aprendimos y aprendemos, crecemos personal, empresarial y humanamente. Este vínculo invaluable es el que celebramos con esta feria. Esperamos que en un futuro no muy lejano, se sumen más cervezas y muchos, muchos más viajes a nuestra experiencia grupal.

Conocé nuestras marcas!

Bruselas
Camila Monserrat
caudal
ximena clavelli